Expertos en salud íntima y ginecoestética alertan sobre la normalización de la incontinencia y recuerdan que existen soluciones reales más allá de las compresas.
Cada vez son más las mujeres sufren en silencio los efectos de la incontinencia urinaria, un problema común pero tratado como algo a ocultar. En vez de hablar de tratamientos o prevención muchas campañas publicitarias sobre productos absorbentes para higiene íntima como compresas o pañales presentan esta condición como algo inevitable que simplemente debe ocultarse, y que la solución es taparlo tanto física como emocionalmente.
Afecta a una proporción significativa de mujeres en España. Según datos del Observatorio Nacional de la Incontinencia, al menos 5 millones de mujeres españolas sufren este problema, representando más del 24% de la población femenina. A pesar del gran número de casos, la incontinencia urinaria sigue siendo un tema tabú y muchas mujeres optan por remedios temporales, como el uso de compresas, en lugar de buscar tratamientos definitivos. Esta tendencia es preocupante, ya que normaliza una condición que puede y debe ser tratada adecuadamente, y con una compresa nunca se llega a obtener una solución.
En lugar de resignarse al uso continuo de productos absorbentes para la incontinencia, con el gasto económico que supone, hoy existen tratamientos efectivos, personalizados para cada caso y mínimamente invasivos con una recuperación inmediata al no ser necesario un postoperatorio.
Lo más importante de cara a tratar este tipo de afecciones es centrarse en un diagnóstico correcto, hecho que no todas las clínicas cuentan con un médico especializado, además de combinar procedimientos y hacer un seguimiento para erradicar por completo el problema. Desde la Clínica Ferraro recomiendan para tratar la incontinencia urinaria de esfuerzo, que es la más común, hacerlo con técnicas eficaces y seguras desde la primera sesión, tales como la última tecnología de láser ginecológico FOTONA con el que cuentan en sus instalaciones.
Recientes investigaciones han puesto de manifiesto que ciertos productos de higiene femenina, como compresas y tampones, contienen sustancias químicas que pueden ser perjudiciales para la salud. Un estudio de la Universidad George Mason, publicado en diciembre de 2023, identificó la presencia de disruptores endocrinos en estos productos, los cuales podrían estar relacionados con afecciones como la endometriosis y los fibromas uterinos. Su uso continuado genera, desde un punto de vista médico, un crecimiento bacteriano que favorece infecciones vaginales y urinarias tales como candidiasis, vaginosis o cistitis. Tanto la vulva como la vagina necesitan transpirar, y las compresas modifican el Ph de las mujeres al no permitir que la zona respire. Por lo tanto se está tomando como solución a un problema algo que únicamente produce más desventajas.
La Dra. Marieta Ramírez, experta en terapia hormonal, láser médico quirúrgico y ginecología estética y funcional de la Clínica Ferraro de Madrid explica que “la incontinencia urinaria no es solo una molestia cotidiana; tiene un impacto significativo en la autoestima, la vida sexual y la calidad de vida de las mujeres. Es fundamental que las afectadas sepan que hay soluciones más allá de las compresas y que busquen ayuda profesional. Nos preocupa que el mensaje dominante sea: ‘usa compresas que es la solución, cuando no lo es, y sigue con tu vida’, cuando en realidad el mensaje debería ser: ‘esto tiene solución, puedes tratarlo y recuperar tu bienestar’”.
FUENTE: FERRARO MEDICAL AESTHETIC
ABC Serrano – Planta 3
Calle Serrano, 61. 28006 Madrid
